miércoles, 4 de enero de 2012

El Real Madrid sigue vivo en la Copa gracias a 22 minutos letales


El Real Madrid sigue vivo en la Copa gracias a 22 minutos letales

(DEPORTES OFERTOPOLIS) El equipo blanco se marchó al descanso perdiendo 0-2 ante un buen Málaga y un pésimo Real Madrid. Tras la reanudación, el Madrid fué mejor y las prestaciones del Málaga bajaron, en 22 minutos se logró la remontada hasta conseguir el 3-2 final.



A falta de fútbol, el Real Madrid volvió a recurrir a la épica. Su principal recurso cuando está contra las cuerdas, y frente al Málaga estuvo a punto de quedar noqueado en el Bernabéu. Los blancos, tras un lamentable primer tiempo, resucitaron en un minuto gracias al ahora suplente Khedira y a un regalo de Sergio Sánchez, el autor del primer tanto de un partido de impulsos que tuvo demasiados goles para tan pobre juego. El campeón, que tardó demasiado en despertar y cuando se quiso dar cuenta ya iba 0-2, estuvo cerca de quedar sepultado en la ida, pero al final al menos salvó bastante el resultado. El Málaga deberá ahora ganar en La Rosaleda tras tirar por la borda todo el gran trabajo y el orden de casi 70 minutos.

No arrancó mal el Madrid, al ofrecer mucha intensidad y movilidad en los primeros minutos, pero fue un inicio que nada tuvo que ver con el resto del partido. Ante un Málaga muy asentado los blancos se atascaron muy pronto por el centro, y dos graves errores de la defensa y de Casillas le condenaron en principio a balón parado. Los blancos no solo acusaron demasiado las ausencias de los lesionados Sergio Ramos y Di María, sino que, hasta Khedira les resucito, fueron cayendo en un preocupante estado de desánimo, y de inexplicable desinterés, sobre todo tras el primer golpe que les dio Sergio Sánchez. Los defensas y el portero locales se quedaron mirando al balón en el córner lanzado por Cazorla, y el Málaga dejó frío al Bernabéu y a un equipo fuera de foco, sin ritmo y desconectado psíquica y físicamente, mientras los jugadores de Pellegrini no dejaban de crecer. Y sin encerrarse en busca de un empate sin goles, como había prometido el técnico chileno. La caraja madridista no se quedó ahí, porque si de medio campo hacia adelante carecía de chispa sin su futbolista más en forma, Di María, atrás estuvo patético al defender los saques de esquina. Volvieron a repetir los blancos, mirando a la pelota, Cristiano no llegó al balón, y Casillas salió a por uvas para que Demichelis conectase otro puñetazo en la mandíbula del campeón.

En 20 minutos, dos tremendos fallos dejaron al Madrid tiritando, helado en el césped, en la grada, y también en el banquillo. Con Mourinho sin moverse de su asiento, como si aquello no fuera con él, hasta que quiso dar un triple golpe de efecto en el descanso con los cambios y empezó a crisparse en el segundo tiempo con las protestas al árbitro. Muestras de impotencia después de haber comprobado que el Málaga incluso estaba superando en fútbol al Madrid tras el intermedio. Jugando con el balón sin miedo, mientras los blancos se ofuscaban en entrar por el centro, sin un ápice de fútbol, y sin ninguna agresividad.

Todo lo que ha conseguido Mourinho con este Madrid al dotarle de una mentalidad y un carácter muy diferentes a los de antaño se fue al garete en un lamentable primer tiempo, en el que el líder de la Liga careció de fuerza en la cabeza y en las piernas. Con el año nuevo desapareció el poderío físico, y también la capacidad de reacción, hasta que apareció la heroica gracias a una parada de Casillas a Van Nistelrooy que pudo suponer el 0-3, al empuje de Khedira, y a la torpeza posterior de Sergio Sánchez. Un solo disparo a portería tuvo el Madrid en el primer tiempo, un zurdazo de Cristiano que despejó Caballero cuando los de Mourinho aún perdían por la mínima.

Hasta la recta final, en la que el Málaga quedó malherido con el empate, nunca dio sensación el Madrid de remontar, con un equipo titular en el que la única sorpresa del técnico fue volver a castigar a Özil y alinear a Kaká y dar la oportunidad en punta a Higuaín en vez de a Benzema. Insistió en Lass como acompañante de Xabi Alonso, cuando Khedira había sido fijo en el Madrid de los récords, hasta que, nadie sabe muy bien por qué, desapareció del once ante el Barça. Y precisaente fue Khedira quien devolvió al Madrid al camino de cuartos, y solo un minuto después, Sergio Sánchez, con un pase atrás del que se aprovechó el listo Higuaín para desbordar a Caballero.

Mourinho no sorprendió con Callejón en el lugar de Di María, porque era el puesto destinado al canterano, pero el Madrid no tuvo juego por las bandas, y el portugués luego quiso arreglarlo con un sorprendente triple cambio que le salió bien, porque además de Khedira también marcó Benzema. Con un último gol que abre de par en par los cuartos para este desconcertante Madrid, al que sigue gustándole bastante más la heroica que el fútbol cuando la situación se pone mal. Y ante el Málaga se torció tanto que estuvo a punto de costarle un enorme disgusto.

Real Madrid: Casillas, Arbeloa (Khedira, min. 45), Albiol, Pepe, Marcelo, Lass, Xabi Alonso, Callejón (Benzema, min. 45), Kaká (Özil, min. 45), Cristiano Ronaldo e Higuaín.

Málaga: Caballero, Sergio Sánchez, Demichelis, Mathijsen, Monreal, Toulalan, Apoño, Seba Fernández, Cazorla (Buonanotte, min. 79), Isco (Duda, Min. 65) y Van Nistelrooy (Rondón, min. 60).

Árbitro: Teixeira Vitienes (Cántabro). Tarjetas amarillas a Arbeloa, Higuaín, Sergio Sánchez, Pepe, Monreal y Xabi Alonso.

Goles: 0-1. Minuto 9. Sergio Sánchez, de cabeza tras un saque de esquina de Cazorla. 0-2. Minuto 29. Demichelis remata de cabeza otro córner botado por Cazorla. 1-2. Minuto 68. Khedira se aprovecha de un rebote y marca con su derecha. 2-2. Minuto 69. Error de Sergio Sánchez que aprovecha Higuaín. 3-2. Minuto 78. Benzema, a pase de Higuaín.



Fuente: lavozdegalicia.es